EL MÁS SABIO Y EL MÁS NECIO
2 Crónicas 1: 7 - 12; 2 Crónicas 9: 1
- 8; 1 Reyes 11: 1 - 43
En una historia de la vida real, se escogió a un
bebé, por su buen parecer, para representar al Señor Jesucristo recién nacido.
Los años pasaron y ese niño en lugar de seguir el
camino del bien se dedicó a una vida desordenada, su aspecto era tan
desagradable que fue escogido para representar el papel de Judas Iscariote.
Al llamado "sabio" Salomón le pasó
igual, luego de recibir sabiduría de parte de Dios y ser reconocido como el más
sabio de su época, se convirtió en un degenerado, y así como edificó un costoso
templo para el Dios verdadero, edificó muchos templos para los demonios.
El punto es que cualquiera de nosotros puede pasar
de la dignidad y la gloria, a un desastre en sólo un instante. Jesús nos
aconsejó: "Velen y oren para que no entren en tentación" Mateo 26:
41.
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